Vértigo

A 60 metros de altura no sabría si caer.

domingo, 16 de noviembre de 2014

Rafael Alberti

 Sabes tanto de mi, que yo mismo quisiera
repetir con tus labios mi propia poesía,
elegir un pasaje de mi vida primera:
un cometa en la playa, peinado por Sofía.
No tengo que esperar ni que decirte espera
a ver en la memoria de la melancolía,
los pinares de Ibiza, la escondida trinchera,
el lento amanecer sin que llegara el día.
Y luego amor, y luego, ver que la vida avanza 
plena de abiertos años y plena de colores, 
sin final, no cerrada al sol por ningún muro.
Tú sabes bien que en mí no muere la esperanza,
que los años e mi no son hijas, son flores,
que nunca soy pasado, sino siempre futuro.


A veces me siento ligera.

O pequeña, o como quieras leerlo. Quiero decir, si me miras, con esos ojos marrones y tan inmensos, me caigo. Me caigo y me siento y escucho todo lo que me quieren decir, y quiero quedarme siempre un rato más para poder sentirme pequeña un rato más. Si me tocas, siento que todo mi cuerpo es lava y que el suelo no me sujeta, y quiero que se quede mi cuerpo con esa sensación. Si me abrazas, quiero decir, si me besas, ya nada me importa y no veo nada, me quedo ciega y me quedo sorda. No escucho ni tengo la oportunidad de ver nada de lo que hay en mi alrededor. Quizá sea porque tengo los ojos cerrado o porque realmente no me importa nada más en el mundo que no seas tu. A veces leo en los libros: ''No creo en los amores de sueños'' Y claro que no, no existen, o son reales o no lo son. Y topar contigo ha sido una de mis mayores realidades. Me basta con levantarme y ver una foto tuya para que entienda que el día si que tiene sentido, para que sonría y el café sea un poco menos amargo, para que no sienta el frío y tenga más energías. Consigues todas mis partes, las buenas, las vivas, incluso a veces alguna mala pero eso no importa. Y aunque me llames cosas sin sentido como ''lentejita'', ''pulgarcita'' o incluso ''pequeña'' sé que todos esos adjetivos realmente me describen porque cuando estoy contigo siempre te veo más grande, y yo más pequeña, más ligera...