Vértigo

A 60 metros de altura no sabría si caer.

domingo, 16 de noviembre de 2014

A veces me siento ligera.

O pequeña, o como quieras leerlo. Quiero decir, si me miras, con esos ojos marrones y tan inmensos, me caigo. Me caigo y me siento y escucho todo lo que me quieren decir, y quiero quedarme siempre un rato más para poder sentirme pequeña un rato más. Si me tocas, siento que todo mi cuerpo es lava y que el suelo no me sujeta, y quiero que se quede mi cuerpo con esa sensación. Si me abrazas, quiero decir, si me besas, ya nada me importa y no veo nada, me quedo ciega y me quedo sorda. No escucho ni tengo la oportunidad de ver nada de lo que hay en mi alrededor. Quizá sea porque tengo los ojos cerrado o porque realmente no me importa nada más en el mundo que no seas tu. A veces leo en los libros: ''No creo en los amores de sueños'' Y claro que no, no existen, o son reales o no lo son. Y topar contigo ha sido una de mis mayores realidades. Me basta con levantarme y ver una foto tuya para que entienda que el día si que tiene sentido, para que sonría y el café sea un poco menos amargo, para que no sienta el frío y tenga más energías. Consigues todas mis partes, las buenas, las vivas, incluso a veces alguna mala pero eso no importa. Y aunque me llames cosas sin sentido como ''lentejita'', ''pulgarcita'' o incluso ''pequeña'' sé que todos esos adjetivos realmente me describen porque cuando estoy contigo siempre te veo más grande, y yo más pequeña, más ligera...

No hay comentarios:

Publicar un comentario