Si, llámame.

Cuando el mundo se te quiera comer. En tus mejores y peores días. Cuando sientas que nadie te quiere, o que todos están contigo. Cuando te rompan el corazón en mil pedazos y creas que no tiene cura. Cuando pienses que necesitas pegar a alguien o simplemente abrazarlo. Cuando quieras odiar o joder a alguien, cuando pienses que todos están en tu contra. Cuando quieras llorar o reírte. Cuando te quieras ir de aquí o quieras ir al cine. Cuando quieras hacer alguna locura. Cuando te quieras emborrachar o drogarte. Cuando necesites un masaje o cuando necesites correr. Cuando quieras que alguien te escuche o necesites consejo. Cuando quieras lanzar una botella al mar o cuando necesites un abrigo porque hace frío. Cuando quieras ver un partido de futbol. Cuando quieras ir a la playa o ver las estrellas desde la montaña. Llámame, a la hora que sea, el día que sea. Que si es mi peor día, el día mas feliz, esté con quien esté o estando sola o el día que decida suicidarme. Si estoy borracha o bien o llorando o enfadada, iré donde tu estés.