14 días

Somos estúpidos, e incluso hay veces que lo demostramos tanto que nos convertimos en ello. Tenemos sentimientos que tapamos porque no los queremos sentir, sin saber que pueden ser más buenos que de lo que parecen. Hay veces que lloramos por gente que ahora brinda por no estar con nosotros, e incluso nos reímos de personas que darían lo que fuera por estar sólo 5 minutos con nosotros. Mi caso es un punto a parte. Estar 14 días hablando con una persona, es el tiempo suficiente para poder conocerla mejor. Y es cierto, está bien que esa persona y tu compartáis los mismos gustos. Que tengáis el tiempo suficiente para una llamada, o para ir a veros. Pero sabéis que es lo peor? Que esa persona viva lo suficientemente lejos como para no poder ir a darle un abrazo cuando sabes que lo necesita, o lo suficientemente lejos como para no poder ver una película juntos o dar una vuelta por las calles de su ciudad. En fin, cuando todo va bien hay momentos que se caen por si solos y van tan mal que solo te apetece irte a dar una vuelta y desahogarte. Hay veces en las que te preguntas el porqué, porque tu, y porque siempre a ti. Porque tienes que ir tu detrás de la gente que va a tres pasos de ti. No pasa nada, hay veces que es mejor dar un paso atrás para poder dar dos para delante. Y bueno, todo tiene solución, y si algo no la tiene, es porque desde un principio no tenía sentido.